Evangelistas callejeros arrestados en Uganda acusados ​​de blasfemia

Dos evangelistas del este de Uganda enfrentan cargos de blasfemia y pasarán la Navidad en prisión luego de ser arrestados durante una campaña evangelística. Joseph Omadi e Isaac Napakol fueron detenidos por la policía el 21 de noviembre después de que una turba musulmana los golpeara mientras predicaban en las calles de la ciudad de Soroti.

Los evangelistas, que estaban llevando a cabo una campaña evangelística de tres días, fueron atacados por la multitud musulmana y la policía intervino y los arrestó. La acusación oficial es “herir los sentimientos religiosos” de la comunidad musulmana, tal como establece el artículo 122 del Código Penal de Uganda. Un tribunal inferior envió a los evangelistas a prisión en espera de juicio.

Según los informes, los musulmanes estaban enojados porque los evangelistas estaban usando el Corán en su mensaje. El líder del distrito musulmán advirtió a los evangelistas que dejaran de citar el Corán, pero continuaron. Posteriormente, las autoridades musulmanas locales trabajaron juntas para capturar a los evangelistas, acusándolos de blasfemia.

En la audiencia celebrada el 20 de diciembre, uno de los evangelistas, Joseph Omadi, cojeaba, lo que expresó su preocupación por una posible tortura mientras estaba bajo custodia. La próxima audiencia está prevista para el 10 de enero de 2024.

Según Christian Post, la comunidad cristiana local expresó su preocupación por la apariencia física de los evangelistas y pidió al tribunal que tratara el caso de manera justa. El presidente de las iglesias de Soroti movilizó a sus miembros para orar y ayunar en respuesta al arresto de los evangelistas.

La ley sobre blasfemia, tal como se describe en la sección 122 del código penal de Uganda, ha sido criticada por ser inconstitucional, violar la libertad de expresión y ser imprecisa en su definición. La ley se considera vaga y delega cuestiones subjetivas a los sentimientos del público, lo que puede dar lugar a una aplicación arbitraria y discriminatoria.

Este arresto y acusación de blasfemia es sólo un ejemplo de los desafíos que enfrentan los cristianos en Uganda. A pesar de la constitución del país y otras leyes que garantizan la libertad religiosa, se han documentado casos de persecución de cristianos, incluidas detenciones injustas y violaciones de derechos fundamentales. La situación pone de relieve la necesidad continua de defender la libertad religiosa y proteger los derechos de los cristianos en Uganda.